UN SALTO HACIA DELANTE

Por Raquel B.

Quién dijo que un curso de conducción de 4×4 es algo superfluo? Cada persona se enfrenta a un curso así con un objetivo; aprender a manejar bien su coche, aprender cuáles son los límites de su vehículo, pasar un buen rato, disfrutar de la naturaleza. Y, probablemente, todo eso es cierto.

Lo que nadie te cuenta es que te puedes quedar con ese objetivo o puedes dar un paso más allá. En un circuito de unos pocos kilómetros cuadrados, con sólo un coche en tus manos, y con tus ojos abiertos y tus oídos atentos, puedes cruzar una puerta, esa puerta tras la cuál ya no hay vuelta atrás.

Miras a tu alrededor y lo ves todo. Ves cómo te inclinas y tu cara queda al ras del suelo y respiras hondo y te levantas. Ves cómo se levanta una cuesta delante de ti como si fuera un muro. Crees que no serás capaz pero alguien te da unas instrucciones y cuando consigues superar el muro, venciendo tus miedos, muchas manos te aplauden. Ves cómo resbalas a un lado y a otro y al final encuentras tu centro.

Y una vez superadas esas pruebas, aparentemente tan difíciles, sonríes y ves que eres uno más. Unos han olvidado sus problemas; otros han aumentado sus capacidades para poder ayudar a los demás; algunos han aumentado su vínculo colaborando entre ellos; pero todos han ido un poco más allá.

Todos han aprendido a que no pasa nada por dar marcha atrás si te equivocas y a que, si no te sientes capaz, no tienes que juzgarte. Y sobre todo, todos han aprendido que reír y disfrutar de la naturaleza y de los compañeros es lo que les une más allá de esa puerta. Con todo mi cariño, y mi agradecimiento,

Raquel